CÓMO PREPARAR UNA BUENA TABLA DE QUESOS

Tenemos invitados o surge una cena de forma espontánea en casa!!!!
Un plato de buen jamón y una buena tabla de quesos, junto con una copa de un vino tinto, puede ser primordial para salir muy airoso de este trance, aunque no sepamos mucho cocinar.

Servir una ración de queso es un arte y una habilidad que se aprende con el tiempo, fijándose en las tiendas especializadas y haciendo varias degustaciones.
En primer lugar es primordial y necesario saber que tipos de queso debemos comprar y poner en una buena tabla de quesos.

Preparación

A tener en cuenta:

  • Variedad.
    Debemos incluir al menos un queso de cada una de las cuatro principales categorías de sabor de queso:

    • Edad: un queso curado siempre es preferible, aunque podemos incluir uno fresco o semi-curado.
    • Sabor: de vaca, de oveja, de cabra, de leche cruda o pasteurizada, de mezcla, con aromas (ahumados, al vino, pimentón, finas hierbas, trufa, etc, etc..).
    • Origen: franceses, suizos, belgas o españoles (Aragón, vascos, extremeños, catalanes, manchegos, etc, etc..) Incluir ya para nota algún queso selecto de pequeña producción, que nosotros conozcamos y que sea desconocido para nuestros invitados.
    • Azul: pasta azul, dentro de todas variedades y denominaciones, sea de vaca, cabra o mezcla.
  • Texturas.
    Siempre se ha de buscar una buena combinación, con quesos secos, de pasta dura o curados, quesos cremosos o de untar y quesos suaves o tiernos. Jugar con las texturas es importante para conseguir el efecto deseado y si además combinamos diferentes zonas, leches y aromas, el éxito está asegurado.
  • Corte y presentación.
    Ya tenemos los quesos elegidos, falta el corte y la presentación. Debe ser en composición lo mas artístico posible, según los cortes e incluso colores.
    Una tabla quesos para estas ocasiones podría ser de 5 a 8 variedades.
    Los quesos de untar en un recipiente bajo tipo cazuelita, generalmente en el centro de la bandeja a presentar, así como los quesos fuertes, en los extremos poner los suaves. Alrededor vamos colocando los diferentes quesos, con sus diferentes cortes. A triángulos, a dados, rectangular, a bastoncillos, en lonchas finas que incluso podemos enrollar, rizos, etc.
  • Acompañamiento.
    La guarnición o acompañamiento es tan importante como la selección de los quesos.
    En plato aparte poner rebanadas de pan tostado o galletas o pan de frutos secos o de pasas, bastoncillos, etc.
    En el mismo plato o bandeja de quesos colocar con buena armonía, algo dulce, como carne membrillo, frutos pasos (ciruelas, orejones, higos o pasas) y frutos secos como almendras y nueces.
    También podemos acompañar sino tenemos frutos secos con alguna fruta troceada o en compota, como la manzana, pera o uvas.
    Por ultimo como gran acompañante no puede falta un buen vino tinto. Aunque también lo podemos maridar con un cava, un oporto o un vino dulce.
    Yo sigo la tradición del refranero español, “Con pan , queso y vino se hace mas corto el camino”.